Los orígenes de Rafael Díaz están en la pequeña parroquia lucense de Candaedo (Alfoz), de la que su padre, como muchos otros gallegos de la época, salió rumbo a Suiza para poder labrarse un futuro mejor. Jose Manuel, que así se llama su progenitor, instaló su residencia en Zug, ciudad próxima a Zúrich. Allí fue donde Rafael comenzó a degustar los encantos del hockey hielo, aprovechando que la pista estaba a menos de cien metros de su casa, igual que también hace su hermana Daniela.
Defensa internacional
Así fue como este deportista gallego comenzó a labrarse un nombre en el hockey hielo suizo. Fue internacional helvético con la selección júnior, la sub-18 y la sub-20 hasta llegar a la absoluta, con la que fue convocado para el Mundial del 2008. 
Díaz se convirtió muy pronto en uno de los mayores talentos del hockey suizo, con cuya selección ya ha disputado un total de 56 encuentros. Jugó el Mundial que Suiza disputó como local en el año 2009 en Zúrich y Berna y los últimos Juegos Olímpicos de Invierno celebrados en Vancouver en 2010.
Precisamente fue esta buena trayectoria en grandes citas internacionales lo que llamó la atención de varios equipos de la NHL. A punto de saltar por primera vez a la NHL, fueron muy insistentes los rumores que situaban al gallego en los Chicago Blackhawks, Anaheim Ducks o, como se confirmó finalmente, los Montreal Canadiens.
Entrevista La Voz de Galicia con motivo de los JJ.OO de Sochi 2014
-Usted ya juega en la mejor Liga del mundo, la NHL. ¿Es comparable a los Juegos?
-Son un poco diferentes. Son mis segundos Juegos. Es el torneo más importante del mundo. Es un honor para mí. Las canchas olímpicas son más grandes, pero las norteamericanas son más rápidas. Ambas me gustan.
-¿Cuáles son sus objetivos?
-Es muy difícil saber hasta dónde podemos llegar. No estamos pensando en las medallas. Hay que ir partido a partido y no mirar más allá. Claro que lo vamos a intentar, pero los rivales son muy fuertes. Debemos ser efectivos en ataque y fuertes en defensa. Mantener la portería a cero es importante.
-Galicia le apoya desde miles de kilómetros de distancia.
-Es muy bonito escucharlo. Me hace sentir muy orgulloso. Es mi segunda casa y me encanta ir siempre que puedo. Es muy bueno que la gente de Galicia pueda conocer un poco más de este deporte y se interese por el hockey hielo. Es un deporte realmente bonito, muy ágil. Tengo amigos españoles en Suiza que ya se han enganchado, incluso los niños juegan a esto. Cada vez hay más españoles que lo practican.
-¿Por qué todos le preguntan por el fútbol, deporte nada relacionado con el hockey hielo?
-Bueno, también me gusta mucho. Y más ahora que la selección española es el mejor equipo del mundo. No me perdí ningún partido del Mundial. Me encanta el tiqui taca. Es agradable verla jugar. Siempre me pongo la camiseta de la selección para verla por la tele. España es un país de fútbol, reforzado por los éxitos de los dos últimos años. Yo siempre estuve celebrando esos éxitos.
-¿Se imagina una selección de hockey hielo tan exitosa?
-Bueno, no sé el nivel que tiene España. He ido a algún partido y he visto algún equipo y no lo hacían nada mal. Sería genial que en algún momento la hubiese.
-¿Qué le gusta de Galicia?
-Por encima de todo, el clima, el sol. Tampoco hace mucho calor, de manera que es perfecta para relajarse y disfrutar del tiempo libre. Me encanta la comida, el marisco, la empanada… me gustan demasiado… Todavía no sé cuándo volveré a Galicia, pero seguro que será este verano. Estoy en Galicia como en casa. Mi padre vino a Suiza para labrarse un futuro. Al fin y al cabo, yo he crecido en Suiza, pero nunca he querido perder el vínculo con España. Mantengo las dos nacionalidades. Ambos países me han dado mucho.
-¿Cree que su éxito puede ser un ejemplo para gallegos y suizos?
-En el deporte de élite todo lo que se consigue es a base de mucho trabajo, mucho sacrificio. Esa es la única clave. Incluso cuando estoy de vacaciones en Galicia no dejo de entrenarme.
-¿Ha seguido otros deportes?
-Por supuesto. El esquí es mi deporte favorito después del hockey.
Esta temporada Raphael Diaz vuelve al hielo a través de los Rangers de New York, con muchas ganas de darlo todo tras su paso por el Calgary Flames entre banquillos y lesiones. Es un jugador que es capaz de levantar el juego y darle la vuelta a un partido cuando está en el hielo.
«Recuerdo que estábamos de vuelta ante Pittsburgh por 3-1 en la serie y que le dio la vuelta», dijo Díaz. «Fue increíble lo que la energía estaba en el grupo después de eso. Nunca es tarde, y tienes que ganar cuatro partidos para hacerlo, fue muy divertido ver eso. Recuerdo que estábamos perdiendo 3-1 contra Pittsburgh y le dimos la vuelta. Fue muy divertido.»
Moita sorte «Raffi» desexámoste dende a terra de teu pai aproveitando a poñer este remate en galego, en homenaxe a tódolos galegos e galegas que foron a outras terras na procura de traballo. Dende miles de kilómetros estaremos apoiándote.
Documentacion
La Voz de Galicia
Today´s Slapshot
Official Website NHL
