En el primer encuentro, ante Lòstregos (7 – 1) los nuestros salieron bien posicionados, dispuestos a contener los envites de los lucenses, pero un par de desajustes defensivos y algo de fortuna rival, hicieron que nos fuéramos al descanso por debajo en el marcador. A pesar de ello, y cuando todo hacía presagiar un monólogo de Lòstreros, Galicia Rollers supo reponerse, dando todo un recital de pases y fintas, para acabar encerrando al rival en su campo durante gran parte del segundo tiempo.
El segundo encuentro, ante Morcegos ( 3 – 7) arrancó mejor para los verdinegros, que se pusieron de inicio 2 arriba. A falta de 8 minutos para el descanso, Galicia Rollers dispuso de una clara ocasión para ponerse 3 – 0, pero la suerte no estuvo de nuestra parte, y en el contragolpe, marcaron los orensanos, que lograron la igualada antes del descanso. Ya en la segunda parte, y tras ponerse por delante el equipo rival, el partido se ganó en intensidad, con continuos ataques de ambos equipos. Una vez más, la suerte y los postes se aliaron con Morcegos, que finalmente se hizo con el encuentro. Un resultado que para nada refleja lo visto en el Daniel Cordido